13 de julio de 2023
En tiempos de dificultades económicas y escasez de mano de obra, la oportunidad de recurrir a contratistas no cualificados para realizar reparaciones puede resultar tentadora. Sin embargo, los propietarios de viviendas, los empresarios, los administradores de fincas y las aseguradoras deben tener en cuenta que recurrir a mano de obra barata y no cualificada puede tener consecuencias peligrosas a largo plazo. En este blog se analizan algunos de los riesgos y factores humanos que entraña el uso de contratistas no cualificados para realizar reparaciones.
Seguridad y protección: a quién permitimos entrar en una vivienda
La gente debe poder confiar en los trabajadores que entran en sus casas y oficinas. Como parte del proceso de adhesión a una red de reparación autorizada, los comerciantes se someten a controles de seguridad para comprobar que no tienen antecedentes penales. No es aconsejable invitar a contratistas a su negocio o vivienda si no puede confiar en sus antecedentes.
Además, los contratistas examinados deben conocer bien los protocolos de seguridad exigidos por la red pertinente -como la HSE en el Reino Unido y la OSHA en Estados Unidos- y comprometerse a cumplirlos plenamente. El cumplimiento de estos requisitos ayuda a evitar lesiones a los contratistas y a reducir la responsabilidad de todas las partes interesadas. Los contratistas no verificados pueden tener normas de seguridad menos rigurosas, poniendo en peligro a los trabajadores y a otras personas en el lugar de la reparación. Los asegurados merecen tener la tranquilidad de que los trabajos de reparación en sus hogares y oficinas serán de alta calidad y no darán lugar a problemas de seguridad en el futuro.
Otra área crítica de cumplimiento es la seguridad de los datos. El Reglamento general de protección de datos (RGPD) de la Unión Europea es una de las leyes de privacidad y seguridad más estrictas del mundo, y otras regiones están reforzando sus normativas de protección de datos ante el aumento de las ciberamenazas. Los datos asociados a los trabajos de reparación deben almacenarse y utilizarse adecuadamente para garantizar el cumplimiento de la normativa y proteger la privacidad de las personas y empresas a las que se presta servicio. Los propietarios de viviendas y empresas pueden estar seguros de que los contratistas de las redes de reparación gestionadas disponen de los controles adecuados para manejar con seguridad su información personal.
Cuestiones financieras y éticas
Fuera de la franquicia de la póliza, los asegurados no suelen pagar directamente las reparaciones cubiertas por el seguro; no obstante, hay cuestiones financieras y éticas que ellos y sus compañías deben tener en cuenta a la hora de seleccionar contratistas de confianza. Antes de emprender un proyecto de reparación con un contratista, es importante asegurarse de que la empresa es viable y financieramente sólida, especialmente en tiempos de tormenta económica, cuando los contratistas están sometidos a una presión añadida. Todos hemos oído historias terribles de personas que se han quedado en la estacada por culpa de contratistas que se han hundido y han abandonado trabajos a mitad de camino. Recurrir a contratistas verificados puede ayudarle a evitar que esas pesadillas se conviertan en realidad. (Si un contratista de una red vetada fallara, las reparaciones las realizaría otro contratista de la red).
Es preferible contratar a contratistas con prácticas financieras sólidas y que hagan un uso correcto de los recursos que se les confían. Los contratistas seleccionados se someten a auditorías periódicas para garantizar que sus registros contables y sus pagos de impuestos son correctos. Este proceso también verifica que ofrecen salarios justos y condiciones de trabajo adecuadas, que utilizan mano de obra legal y debidamente formada, y que evitan todo tipo de esclavitud moderna.
Aportar verdadero valor
El precio es, por supuesto, un factor importante a la hora de seleccionar un contratista para un trabajo de reparación, pero no es el único factor que merece la pena tener en cuenta. En esta época de inflación y aumento de los costes de mano de obra y materiales, un presupuesto de reparación muy por debajo del precio de mercado probablemente sea demasiado bueno para ser cierto.
Las aseguradoras y los propietarios deben utilizar más discreción para identificar a socios que coincidan con sus valores, en los que puedan confiar y que realicen un trabajo de calidad. Recurrir a contratistas acreditados ofrece la mayor probabilidad de que el trabajo se haga bien, con seguridad y por un precio justo.
En mi próximo blog, analizaré algunos de los riesgos relacionados con los materiales que entraña el uso de contratistas no autorizados.
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