15 de julio de 2024
Los fabricantes europeos se enfrentan a una importante revisión de la legislación sobre seguridad de los productos con el nuevo Reglamento general de seguridad de los productos (UE) 2023/988 (RGPD). A medida que se acerca la fecha de aplicación de la norma, el 13 de diciembre de 2024, la Comisión Europea sigue aclarando algunos aspectos del RGPD. Recientemente, la Comisión ha publicado su Reglamento de Ejecución (UE) 2024/1435, que establece un modelo para que las empresas lo utilicen al emitir un aviso de retirada.
Disposiciones del RGPD relativas a los avisos de retirada
Los artículos 35 y 36 del RGPD establecen tanto la información que debe facilitarse a los consumidores en caso de retirada de un producto o advertencia de seguridad, como la forma de transmitir dicha información. El artículo 35, apartado 1, exige a los operadores económicos y a los proveedores de mercados en línea que notifiquen directamente a todos los clientes afectados que puedan ser identificados. Si no es posible ponerse en contacto con algunos de los clientes afectados, el artículo 35.4 exige que el aviso de retirada se distribuya "a través de otros canales adecuados", como el sitio web de la empresa, las redes sociales, boletines informativos e incluso anuncios a los medios de comunicación tradicionales.
El Reglamento también establece que la información escrita sobre la retirada de un producto debe entregarse a los consumidores en forma de notificación de retirada. Los elementos clave de dicha notificación se describen en el apartado 2 del artículo 36. Además, el RGPD establece que la Comisión creará un modelo de notificación de retirada para garantizar la coherencia en toda la UE. El Reglamento de Ejecución se adoptó el 24 de mayo de 2024 y se aplicará junto con el RGPD a partir del 13 de diciembre de 2024.
El uso de la plantilla es voluntario. Sin embargo, dado el énfasis del RGPD en que los avisos de retirada deben ser "claros, transparentes y describir claramente el riesgo en juego", las empresas harían bien en utilizar la nueva herramienta. Como mínimo, seguir la plantilla ayudará a las empresas a asegurarse de que incluyen todos los elementos requeridos de un aviso de retirada, tal como se establece en el artículo 36, apartado 2. Cuando se trata de la retirada de un producto y el consiguiente escrutinio por parte de las autoridades y los consumidores, cualquier paso en falso, por pequeño que sea, puede marcar la diferencia entre el éxito de la retirada y un daño duradero a la reputación de la marca, además de posibles medidas coercitivas.
Prepararse para la retirada
Las retiradas de productos son cada vez más frecuentes, como venimos observando en nuestros informes trimestrales del Índice Europeo de Retiradas. Las retiradas de productos en Europa aumentaron un 10,4% entre el cuarto trimestre de 2023 y el primero de 2024, y tanto en 2022 como en 2023 se establecieron nuevos récords del mayor número de retiradas registradas en un periodo de diez años. Aumenta la presión para que las empresas garanticen la seguridad de sus productos. Otras normativas, como el Reglamento sobre la seguridad de los juguetes , también imponen requisitos de retirada y notificación de productos defectuosos. Los reguladores están actualizando marcos obsoletos y estableciendo otros nuevos para las tecnologías emergentes. Además, los consumidores exigen más transparencia y responsabilidad, y los medios de comunicación prestan cada vez más atención a los problemas de seguridad de los productos.
A pesar del panorama cada vez más abarrotado de riesgos, las empresas siguen disponiendo de herramientas para proteger su reputación y sus resultados. Con el creciente énfasis en la retirada de productos, es especialmente importante que las empresas establezcan y actualicen periódicamente sus planes de retirada y crisis. Estos planes deben ponerse a prueba periódicamente mediante simulacros de retirada para garantizar que las partes implicadas entienden sus funciones y que no hay lagunas en el plan. La creación de un grupo de colaboradores externos, como expertos en reputación de marca, especialistas en simulacros de retirada, bufetes de abogados especializados en responsabilidad civil por productos defectuosos, etc., también puede ayudar a garantizar que su empresa esté preparada cuando se produzca una crisis relacionada con un producto, y no si ocurre.
Con la confianza de las principales marcas del mundo, Sedgwick brand protection ha gestionado más de 7.000 de las retiradas de productos más sensibles y con plazos de entrega más críticos en más de 100 países y más de 50 idiomas, durante más de 30 años. Para obtener más información sobre nuestras soluciones de retirada y reparación de productos, visite nuestro sitio web aquí.
