Tras un aumento constante de las muertes notificadas causadas por productos infantiles defectuosos, la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo (CPSC) está recibiendo presiones para que actúe de forma más agresiva y presione a las empresas para que retiren del mercado los productos que supongan un riesgo para niños y bebés.
En 2021, Estados Unidos registró el segundo mayor número de muertes relacionadas con productos infantiles de los últimos 10 años. Y la tendencia parece continuar. No solo han aumentado las muertes este último año, sino también el número de lesiones e incidentes. Este mes, Kids In Danger (KID) ha publicado su informe anual, Tracking Trends: Children's Product Recalls in 2021, en el que se analizan los productos infantiles retirados por la CPSC. En 2021, se produjeron 14 muertes, 136 lesiones y 6.058 incidentes antes de la retirada, en comparación con 2020, en el que no hubo muertes, nueve lesiones y 704 incidentes. Estos problemas notificados no solo se produjeron con productos infantiles, sino también con productos generales como imanes y vitaminas.
Nuestro informe sobre el estado de la nación de 2022 reveló tendencias similares en el sector de los productos de consumo en su conjunto. Los juguetes infantiles, por ejemplo, fueron una de las categorías de productos más retiradas.
Ley de transparencia en la seguridad de los productos
"Podemos y debemos solucionar esto. La CPSC necesita poder para decidir cuándo y cómo comunicar a los consumidores información vital para la salud y la seguridad sobre productos potencialmente peligrosos, y las empresas que retiran productos del mercado deben colaborar con la CPSC para dar prioridad a la rapidez y eficacia de la retirada", declaró recientemente la diputada Jan Schakowsky, presidenta de la Subcomisión de Protección del Consumidor y Comercio de la Cámara de Representantes de EE.UU., tras examinar las estadísticas. "Espero abordar estas cuestiones en mi subcomité, idealmente de manera bipartidista, incluyendo la aprobación de la Sunshine in Product Safety Act para garantizar que la CPSC pueda alertar rápidamente al público sobre productos potencialmente peligrosos."
Si el Congreso aprueba la ley, facultará a la CPSC para emitir advertencias sobre los productos y ordenar su retirada sin dar voz a los fabricantes sobre cómo, cuándo e incluso dónde se divulga la información. De hecho, la CPSC, entre otros organismos reguladores, ya está aprovechando las redes sociales para difundir avisos de retirada de productos con el fin de aumentar su alcance entre los padres y otros consumidores.
Recomendaciones
Debido a la creciente concienciación de los consumidores y a la presión resultante sobre el Congreso y la CPSC, los fabricantes deben informar con mayor prontitud de cualquier problema que pueda amenazar la seguridad de los niños. También es importante que los fabricantes de juguetes, ropa y otros productos infantiles creen y mantengan canales de comunicación claros tanto con la CPSC como con los consumidores, para que se les vea cooperar con los reguladores y fomentar una mayor confianza entre los defensores de los consumidores.
Las empresas, especialmente las que fabrican y venden productos infantiles, deben dar prioridad a su preparación para la retirada de productos, de modo que puedan responder con rapidez y eficacia cuando se produzcan fallos en los productos, protegerse contra los litigios de responsabilidad civil por productos defectuosos y proteger su reputación en un momento en que el escrutinio de su sector es más intenso que nunca.