4 de septiembre de 2025
Cuando un empleado se toma un PTO o una excedencia planificada, puede afectar temporalmente a las operaciones y la productividad, pero es algo que su empresa puede planificar. Las ausencias empiezan a ser un problema cuando un empleado tiene un patrón de ausencias inesperadas, lo que se denomina absentismo.
El absentismo no es sólo una infracción de las políticas de asistencia, sino un problema importante tanto para los empresarios como para los empleados. Cuando alguien no se presenta a trabajar, los jefes pueden tener que apresurarse para cubrir su turno, u otros empleados pueden tener que cubrir su trabajo por ellos. Con el tiempo, el absentismo crea un ambiente de trabajo insatisfecho o incluso hostil, en el que la norma es una menor productividad, una moral baja y unos costes más elevados.
En pocas palabras, el absentismo afecta a todos en el lugar de trabajo, y los datos muestran que no está mejorando. Entonces, ¿qué está impulsando esta tendencia y qué pueden hacer los empresarios para adelantarse a ella?
La situación actual del absentismo
Los expertos en recursos humanos consideran que un tasa de absentismo aceptableo el porcentaje de tiempo que un empleado se ausenta del trabajo, se sitúa en torno al 1,5%. En 2024, la tasa nacional de absentismo fue del 3,2%un 0,10% más que en 2023. Este aumento de las ausencias supone un reto cada vez mayor para las empresas de todos los sectores.
Cuando los empleados faltan con frecuencia, las empresas pagan un alto precio. Según los CDC, el absentismo cuesta a las empresas estadounidenses 225.800 millones de dólares anualesLos datos de Sedgwick muestran que la pérdida de productividad por sí sola puede alcanzar los 11.000 dólares anuales por empleado. Más allá de las pérdidas de productividad, el absentismo también provoca tiempos de inactividad operativa y obliga a las empresas a gastar más en contratación, incorporación y pago de horas extraordinarias.
Las ausencias actuales también siguen un patrón. Según los datos de Sedgwick, los lunes son el día más habitual de ausencias intermitentes, y el volumen disminuye a medida que avanza la semana. También son frecuentes los picos de absentismo en torno a grandes acontecimientos y días festivos. De hecho, aproximadamente 1 de cada 5 estadounidenses encuestados informaron de que tenían previsto faltar al trabajo el lunes siguiente a la Super Bowl de 2025. Ese día, los datos de Sedgwick muestran que el 9,5% de los empleados con un caso abierto de ausencia intermitente no se presentó a trabajar.
¿Qué impulsa hoy el absentismo?
Hay muchas razones por las que los empleados pueden faltar inesperadamente al trabajo. Las enfermedades y lesiones siguen siendo la principal causa de ausencias, sobre todo en sectores con funciones físicamente exigentes. Sin embargo, incluso en las oficinas, las enfermedades estacionales y las dolencias crónicas obligan a los empleados a ausentarse del trabajo sin previo aviso.
La falta de opciones de trabajo flexibles y de sistemas de apoyo también contribuye al absentismo. Cuando un empleado tiene dificultades para encontrar una guardería, necesita cuidar a un ser querido o tiene problemas de transporte, es posible que tenga que faltar al trabajo ese día si no dispone de una opción de trabajo flexible. En 2024 más de 3,6 millones de ausencias en EE.UU. se atribuyeron a obligaciones familiares o personales. El libro de negocios de Sedgwick en 2025 muestra que el 33,9% de las bajas son por motivos familiares y el 12,8% son personales, proyectando 875.000 nuevas bajas familiares o personales para finales de año. Esto indica que hoy en día muchos empleados no reciben el apoyo o la flexibilidad que necesitan para gestionar su vida fuera del trabajo, lo que repercute en su capacidad para presentarse.
La mala salud mental es otro factor clave del absentismo. El estrés, la ansiedad y la depresión pueden afectar significativamente a la capacidad de un empleado para trabajar de forma constante. Los datos muestran que los empleados con mala salud mental tienen casi cuatro veces más ausencias imprevistas en un año que los demás. Y según un estudio de Sedgwick, entre el 30% y el 55% de los empleados con una solicitud de incapacidad por salud mental presentan más de una solicitud en un periodo de 36 meses. Sedgwick también descubrió que las reclamaciones por salud mental duran un 24% más que la media de las reclamaciones. En conjunto, estas tendencias nos indican que muchos empleados no están recibiendo la ayuda que necesitan durante su baja, lo que se traduce en recuperaciones más largas, mayores tasas de recaída y más tiempo de baja laboral.
Cómo pueden los empresarios gestionar el absentismo
Aunque los empresarios no pueden controlar lo que ocurre en la vida personal de sus empleados, sí pueden aplicar estrategias para apoyarles y ayudarles a gestionar mejor los problemas a los que puedan enfrentarse. He aquí algunas formas en que los empresarios pueden ayudar a mantener el absentismo bajo control:
- Haga comprobaciones periódicas con los empleados: A menudo hay señales de alarma de absentismo antes de que empiece a producirse. Mantener reuniones informales y constantes con los empleados puede ayudar a los empresarios a generar confianza, detectar signos de agotamiento o estrés y ofrecer apoyo antes de que se produzca una ausencia.
- Dote a los directivos de primera línea de formación y recursos: Los directivos suelen ser los primeros en darse cuenta de los patrones de asistencia de sus empleados. Proporcionarles las herramientas y la orientación adecuadas puede ayudarles a detectar los signos de absentismo y a saber cómo responder a las ausencias imprevistas manteniendo la moral del equipo.
- Fomente una cultura de confianza y flexibilidad: Los empleados con una vida personal ajetreada pueden beneficiarse de opciones laborales flexibles como el trabajo a distancia o los turnos alternativos. Además, ofrecer recursos de salud mental como asesoramiento, grupos de apoyo entre compañeros o programas de asistencia a colegas puede crear un entorno más solidario y ayudar a reducir las ausencias.
- Asóciese con un administrador externo (TPA): Puede ser difícil gestionar el absentismo sin las herramientas, el apoyo y la experiencia adecuados. Encontrar un TPA de confianza que ayude a realizar un seguimiento del tiempo libre, identificar los patrones de ausencia y planificar las interrupciones puede ayudar a los empresarios a adelantarse al absentismo.
Simplificar la complejidad de las ausencias
El absentismo no es sólo un trastorno para los empresarios: puede ser una señal de que algo más grave está ocurriendo. Dado que el absentismo está ligado a tantos factores, puede ser difícil identificar su causa y saber cómo responder. Por eso, las empresas se asocian con nuestro equipo de Sedgwick para simplificar las ausencias de sus empleados.
Trabajamos con las empresas para crear programas integrales de gestión de bajas y discapacidades que les ayuden a cumplir las normas, reducir el impacto de las ausencias y mantener la productividad de sus plantillas. Con programas de salud mental y bienestar, planificación de la vuelta al trabajo y apoyo para adaptaciones, nos aseguramos de que los empleados reciban la ayuda que necesitan para volver al trabajo o seguir prosperando en él.
Nuestra tecnología desempeña un papel fundamental para que esto sea posible. Con herramientas basadas en IAnuestros examinadores pueden identificar rápidamente oportunidades de intervención temprana, como ofrecer a los empleados opciones de trabajo modificadas o ponerlos en contacto con recursos clínicos. Pero lo más importante es que estas herramientas ayudan a nuestros examinadores a ser poderosos defensores, guiando a los empleados a través de un complejo proceso de recuperación con empatía y cuidado. Nuestra tecnología agiliza los flujos de trabajo para que los examinadores puedan dedicar menos tiempo a tareas administrativas y más a ayudar a quienes lo necesitan. Esto no sólo mejora los resultados de la reincorporación al trabajo de los empleados, sino que refuerza los resultados del programa para nuestros clientes.
Reflexiones finales
Puede que el absentismo esté aumentando, pero no tiene por qué ser un reto constante. Con las estrategias adecuadas, los recursos y un socio de confianza, las empresas pueden hacer algo más que responder a las ausencias: pueden reducirlas. Fomentando una cultura que apoye el bienestar y la flexibilidad, las empresas pueden animar a sus trabajadores a seguir trabajando, a seguir comprometidos y a seguir haciendo lo que mejor saben hacer.
Para saber cómo Sedgwick puede ayudarle a administrar los permisos y gestionar las ausencias de su organización, haga clic aquí.
Etiquetas: Gestión de ausencias Absentismo empresarios Baja excedencia