La UE intensifica el control del "lavado verde" con una nueva propuesta

30 de abril de 2024

Compartir en LinkedIn Compartir en Facebook Compartir en X

Los reguladores de la Unión Europea examinarán más de cerca las alegaciones medioambientales tras varios avances recientes con propuestas destinadas a proteger los derechos de los consumidores, promover decisiones respetuosas con el medio ambiente y crear una economía circular. En lo que va de 2024, se ha avanzado con las propuestas de modificación de la Directiva sobre prácticas comerciales desleales y la Directiva sobre derechos de los consumidores, así como con la propuesta de Directiva sobre la justificación de las alegaciones ecológicas.

Detalles de la Directiva sobre la justificación de las reivindicaciones ecológicas

La Comisión Europea presentó por primera vez la propuesta de Directiva sobre reclamos verdes en marzo de 2023. Un año después, en marzo de 2024, el Parlamento Europeo adoptó su posición sobre la directiva propuesta y el nuevo Parlamento la retomará tras las elecciones de junio.

Aunque el objetivo de la Directiva es facilitar a los consumidores la identificación y elección de productos respetuosos con el medio ambiente, exigirá a los fabricantes y proveedores que tomen medidas adicionales para justificar las declaraciones medioambientales que quieran hacer sobre sus productos. La Directiva abarcará todas las declaraciones medioambientales voluntarias que hagan las empresas, a menos que estén cubiertas por normas comunitarias vigentes (por ejemplo, la etiqueta ecológica de la UE o el logotipo de alimentos ecológicos). La propuesta también esboza las declaraciones explícitas que cubrirá.

La directiva propuesta contiene varias medidas clave para lograr el objetivo de que las alegaciones ecológicas sean "fiables, comparables y verificables en toda la UE":

  • Criterios claros sobre cómo deben demostrar las empresas sus declaraciones y etiquetas medioambientales;
  • Exigencia de que estas declaraciones y etiquetas sean comprobadas por un verificador independiente y acreditado.
  • Nuevas normas sobre gobernanza de los sistemas de etiquetado ambiental para garantizar su solidez, transparencia y fiabilidad.

Los Estados miembros asignarán a las autoridades competentes la tarea de hacer cumplir la directiva, iniciar investigaciones sobre las declaraciones medioambientales de las empresas, comprobar periódicamente las declaraciones medioambientales explícitas y publicar un informe con los resultados de esa comprobación. Las empresas que incumplan la directiva tendrán 30 días para corregir sus declaraciones o dejar de hacerlas. Las autoridades competentes también estarán facultadas para imponer multas y otras sanciones a las empresas que no cumplan la directiva.

Actualizaciones de las normas de consumo de la UE para capacitar a los consumidores de cara a la transición ecológica

Dos años después de que la Comisión Europea propusiera por primera vez actualizar la Directiva sobre prácticas comerciales desleales y la Directiva sobre requisitos de capital para apoyar la transición ecológica, el Consejo Europeo ha dado su aprobación definitiva a la Directiva, último paso del proceso de toma de decisiones. Los Estados miembros de la UE dispondrán ahora de 24 meses para incorporar las actualizaciones a su legislación nacional.

Las modificaciones de la CRD incluyen nuevas normas que obligan a las empresas a facilitar a los consumidores información sobre la durabilidad y reparabilidad de un producto antes de su compra y a hacerlo de forma clara y comprensible. Las enmiendas a la Directiva sobre prácticas comerciales desleales amplían la lista de prácticas comerciales desleales para incluir, entre otras, no informar a los consumidores sobre las características que limitarían la durabilidad del producto y hacer afirmaciones genéricas y vagas sobre el medio ambiente.

Mirando al futuro

Estas dos directivas pretenden trabajar en tándem para ayudar a la UE a lograr su prohibición del lavado verde y proteger a los consumidores. Después de que un estudio realizado por la Comisión en 2020 revelara que más de la mitad (53,3%) de las alegaciones medioambientales en la UE eran vagas, engañosas o infundadas, no es de extrañar que las autoridades se movilizaran rápidamente contra el lavado verde.

La Comisión Europea no es el primer organismo gubernamental que ataca el lavado verde. En el Reino Unido, la Advertising Standards Authority (ASA) ya ha declarado culpables de lavado verde a varias empresas de alimentación y bebidas, y un análisis revela que el número de anuncios prohibidos por "lavado verde" se triplicó en solo un año.

Este mayor escrutinio por parte de reguladores, consumidores y otros grupos sugiere que las empresas deberían reevaluar o incluso replantearse sus alegaciones medioambientales. Cuando los organismos reguladores determinan que las alegaciones medioambientales de una empresa son engañosas, se producen pérdidas económicas, como la suspensión de todos los anuncios que contengan la alegación, la posible retirada del producto del mercado para solucionar cualquier problema de etiquetado e incluso multas de las autoridades competentes.

Pero más allá de eso, en un mercado en el que los consumidores se toman en serio el compromiso de una empresa con el medio ambiente, existe la posibilidad de litigios y costes sustanciales para la reputación de una marca.

Las empresas que han hecho o tienen previsto hacer alegaciones medioambientales sobre sus productos deben evaluar si esas alegaciones se mantendrán bajo el escrutinio de los reguladores y los consumidores. Incluso si su empresa se siente segura de sus alegaciones medioambientales, es importante contar con el apoyo de terceros -como abogados especializados en el sector, expertos en protección de marcas o empresas de seguros de retirada de productos- para asegurarse de que está preparada para comunicar a las autoridades reguladoras y a los consumidores los hechos en los que se basa su promesa.

Con la confianza de las principales marcas del mundo, Sedgwick brand protection ha gestionado más de 7.000 de las retiradas de productos más sensibles y con plazos de entrega más críticos en más de 100 países y más de 50 idiomas, a lo largo de 25 años. Para obtener más información sobre nuestras soluciones de retirada y reparación de productos, visite nuestro sitio web aquí.

Etiquetas: Protección de marcas, recuperación de marcas, Consumidores, productos de consumo, recuperación de marcas, medio ambiente, impacto ambiental, Europa, Unión Europea, Preservación de marcas, recuperación, normativa, sostenibilidad, sostenible