El año pasado, Sedgwick adquirió Direct Health Solutions (DHS), proveedor líder en Australia de soluciones de telesalud para empresas. En este blog, Karen Samuel, directora general en funciones de DHS, nos habla de la importancia de dar prioridad al bienestar de los empleados y del coste de ignorarlo.
A la luz de la reciente pandemia y del mayor énfasis en el bienestar y la salud mental de los empleados en el lugar de trabajo, se ha producido un cambio en la forma en que las empresas gestionan el absentismo laboral. Con el aumento de la popularidad de los entornos de trabajo remotos e híbridos, los servicios de telesalud han surgido como una herramienta fundamental para ayudar a las organizaciones a gestionar el absentismo y mejorar el bienestar mental y físico de todos los empleados.
Dar prioridad al bienestar mental y físico de los empleados no sólo reduce la tasa global de absentismo de una organización, sino que también ayuda a evitar los costes asociados al absentismo.
Por qué es importante
La gestión del absentismo laboral debe ser una prioridad para cualquier empresa, ya que desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de una organización productiva. Los estudios han demostrado que cuanto más feliz es un empleado, más probable es que pueda rendir al máximo tanto profesional como personalmente.
El absentismo laboral cuesta miles de millones a las empresas y, si no se controla, puede tener repercusiones negativas en toda la empresa. También puede ser señal de problemas más amplios, como la salud y la seguridad en el lugar de trabajo, la cultura o los problemas de estrés y salud mental, por citar algunos.
Cuando se trata de gestionar el absentismo laboral, la centralización de los datos relacionados con el absentismo, la supervisión y el seguimiento eficaces de los problemas y la prestación de asistencia sanitaria a los empleados a petición proporcionarán a los departamentos de recursos humanos más claridad y control sobre su plantilla.
Un estudio sobre el absentismo laboral
Direct Health Solutions (DHS), una empresa de Sedgwick, es uno de los principales proveedores especializados de soluciones de telesalud para empresas y programas de gestión de ausencias y lesiones en Australia. Como una de las mayores organizaciones de teletratamiento del país, DHS recibe una media de más de 500.000 llamadas al año por ausencias y lesiones, y cuenta con un centro de telesalud 24 horas al día, 7 días a la semana, que impulsa sus programas de gestión de ausencias.
DHS lleva a cabo una encuesta anual sobre la gestión del absentismo y el bienestar de los empleados para proporcionar datos de referencia y tendencias clave que los empleadores pueden utilizar a la hora de gestionar el absentismo laboral en Australia. En la recién publicada 12ª edición de este informe, los niveles de absentismo se registraron desde el 1 de enero de 2022 hasta el 31 de diciembre de 2022 utilizando los datos proporcionados por 132 empresas de toda Australia que emplean colectivamente a más de medio millón de empleados. Se pidió a los encuestados que proporcionaran datos basados en todo el absentismo no planificado, incluidos los permisos personales, los permisos por compensación laboral y los permisos no autorizados, tanto remunerados como no remunerados.
Lo que dicen los datos
Según los datos recogidos en esta encuesta, el absentismo general de los empleados aumentó en algo más de dos días y medio (23%) con respecto a 2019: los empleados se tomaron una media de 13,8 días de baja en 2022. De las empresas que participaron en la encuesta, el 58% creía que su absentismo había aumentado en el periodo de 12 meses.
Motivos más frecuentes de absentismo
Según los resultados de la encuesta, los tres motivos más comunes de ausencia de los empleados fueron la baja por cuidado de un familiar, la baja relacionada con el coronavirus y la baja por enfermedad no genuina.
Dado el periodo en el que se realizó la encuesta, no sorprende ver que COVID-19 tuvo un impacto significativo en el absentismo laboral. El COVID provocó un aumento de los periodos de baja a lo largo de 2022, a medida que los australianos contraían la enfermedad y se ausentaban del trabajo por enfermedad o para ayudar a sus familiares. Algunas organizaciones tuvieron una tasa de absentismo del 20% o superior durante el pico de COVID en enero de 2022. En general, el 80% de los empresarios indicaron que COVID-19 provocó un aumento de las ausencias en 2022.
Además, las iniciativas de salud pública han aumentado la concienciación sobre la necesidad de quedarse en casa cuando se está enfermo para frenar el contagio. Esto podría llevar a que los empleados sean más propensos a tomarse un día libre por auténticas enfermedades de corta duración, como resfriados, gripes e infecciones.
El elevado número de ausencias relacionadas con la COVID, combinado con la mayor concienciación sobre la salud pública, también impulsa un aumento del número de bajas por cuidado de familiares, ya que se supone que los empleados pueden haber tomado una baja por cuidado de familiares para atender a un miembro de la familia que padece COVID-19 o, alternativamente, las escuelas y guarderías insisten en que los niños enfermos permanezcan en casa cuando no se encuentran bien. Esto hace que aumente el número de excedencias para el cuidado de personas dependientes en 2022.
Según el 43% de los empresarios, las bajas por enfermedad no justificadas aumentaron en 2022. Las bajas no justificadas se deben principalmente a la baja motivación del trabajador y pueden verse agravadas por su escasa resiliencia y sus escasas habilidades de afrontamiento y planificación. Si los directivos pueden averiguar la causa subyacente de la baja laboral, o los factores que la provocan, estarán en buena posición para apoyar a los empleados y mejorar la asistencia.
Los problemas de salud mental también están provocando un aumento de los permisos por motivos personales. El 57% de los empresarios declararon que las ausencias debidas a problemas de salud mental han aumentado en los últimos 12 meses, siendo los tres factores principales la carga de trabajo, los factores no laborales y las enfermedades personales. Según la encuesta de ADP People at Work, uno de cada cinco australianos (21%) se ha ausentado del trabajo en los últimos 12 meses debido a problemas de salud mental, cifra que aumenta hasta el 46% en el caso de los empleados que consideran que su lugar de trabajo no es saludable desde el punto de vista mental. La causa más común de estrés citada en ese informe fue el aumento de la responsabilidad desde la pandemia y la prolongación de la jornada laboral.1 El informe State of Workplace Mental Health in Australia (Estado de la salud mental en el lugar de trabajo en Australia) reveló que casi la mitad de los empleados afirman que su trabajo se resiente debido a una mala salud mental, y esta cifra aumenta hasta el 56% cuando se analiza únicamente a los millennials.2
El elevado número de empleados que se dan de baja por enfermedad es precisamente la razón por la que las empresas necesitan gestionar mejor el absentismo de sus empleados e invertir en su bienestar. Con herramientas y estrategias de gestión eficaces, las empresas pueden entender mejor el motivo de estas ausencias y trabajar con los empleados para reducir el número de días cogidos, al tiempo que ofrecen orientación para mejorar y apoyar el bienestar general del empleado.
Efectos sobre la productividad y la rentabilidad
El absentismo laboral es costoso y cada vez lo es más: los datos de la encuesta revelan que el coste directo medio del absentismo por empleado y año ha aumentado de 3.395 a 4.025 dólares. Los efectos del COVID-19 y el aumento del coste de la vida han puesto a prueba la salud mental de muchos australianos. El 80% de las empresas encuestadas en el estudio de 2022 sobre gestión del absentismo y bienestar de los empleados realizado por DHS afirmaron que las restricciones de la COVID-19 han provocado un aumento del absentismo.
Los datos revelan que el absentismo en los centros de contacto sigue siendo más elevado que en los puestos que no son de este tipo. Los centros de contacto suelen considerarse estresantes, lo que puede atribuirse a factores ambientales como las llamadas telefónicas estresantes, un elevado volumen de llamadas y el trato con clientes muy emotivos y/o agitados. Estos centros también suelen tener una mayor rotación de personal en comparación con los centros que no son de contacto. En consecuencia, es posible que más empleados se sientan más inclinados a ausentarse del trabajo para ayudar a controlar sus niveles de estrés, lo que puede explicar por qué los índices de absentismo en los telecentros son más elevados. Los empleados de los telecentros también pueden tener menos flexibilidad durante el horario laboral, por ejemplo, en cuanto a cuándo, dónde y cómo realizan su trabajo. Esto limita la capacidad del empleado para gestionar sus compromisos personales y laborales.
Para la mayoría de las empresas, el absentismo no planificado es costoso. Cuando un empleado se ausenta repetidamente durante largos periodos de tiempo sin previo aviso, su carga de trabajo se traslada a sus compañeros. Esos empleados corren entonces el riesgo de sobrecargarse de trabajo, descontentos y estresados hasta el punto de necesitar también una baja laboral, lo que puede resultar muy costoso en función de las funciones y responsabilidades de los empleados ausentes.
Gestión eficaz del absentismo laboral
Según el informe de la encuesta sobre gestión del absentismo y bienestar DHS 2023, los tres métodos más eficaces para gestionar el absentismo son:
- Escalada a la alta dirección
- Entrevistas de reincorporación al trabajo
- Puntos formales de revisión de las ausencias
Estos resultados ponen de relieve lo importante que es para las empresas gestionar eficazmente el absentismo de sus empleados, y el coste que les supone cuando no se gestiona de forma efectiva. Al dar prioridad a la salud física y mental de los empleados, así como a su bienestar -especialmente si se tienen en cuenta los efectos persistentes y los cambios de mentalidad tras la COP-19-, las empresas pueden crear una cultura en el lugar de trabajo que valore y apoye a sus empleados.
Desde la adquisición de DHS, Sedgwick está mejor equipada que nunca para ofrecer una combinación de servicios que cubren cualquier escenario en el que las personas se ausentan del trabajo. Nuestros clientes cuentan con nosotros para apoyar y mejorar la salud y la productividad de su plantilla de forma rentable, eficaz y conforme a la normativa. Con nuestras soluciones de software, las empresas pueden gestionar el cumplimiento de las complejas normativas federales y estatales en materia de excedencias y adaptaciones del puesto de trabajo. También ofrecemos una gama de servicios especializados de RRHH y plataformas de software de seguridad en Australia. Nuestras soluciones de gestión de ausencias complementan nuestras soluciones en desarrollo de gestión de lesiones, productividad de los empleados y compensación de los trabajadores en Australia, proporcionando a nuestros clientes -incluidas algunas de las empresas más grandes e innovadoras del país- el apoyo añadido de los recursos y la experiencia globales de Sedgwick.
Este contenido fue publicado originalmente por DHS, una empresa de Sedgwick.
Leer más > Descargue una copia de nuestro informe 2023 sobre Gestión del absentismo y bienestar y explore las soluciones de DHS.
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