Las primeras previsiones de la temporada de huracanes atlánticos de 2024 -del1 de junio al30 de noviembre- apuntan a una intensa actividad. Las temperaturas de la superficie del mar previstas de agosto a septiembre serán más cálidas que la media y es probable que influyan en las ventanas comerciales del Caribe, factores ambos que aumentarán la actividad de los huracanes atlánticos. Aunque persisten importantes incertidumbres en las perspectivas ampliadas, ahora es el momento de prepararse.
La preparación es la clave
La preparación es a veces la única diferencia mensurable entre sufrir un siniestro o no, proteger sus bienes y activos o no, y para los locales, incluso superar la tormenta sano y salvo o no. Tanto si está directamente en la costa como si se encuentra en el interior, no se puede subestimar el valor de prepararse con antelación y elaborar un plan.
Para los equipos relacionados con catástrofes (CAT) desplegados en las zonas afectadas tras el paso de un huracán, la preparación es igualmente importante. Ya se trate de los equipos de investigación forense que restauran los edificios dañados o de los liquidadores de siniestros que gestionan las pérdidas materiales, aunque pueda parecer que su trabajo comienza en el momento de la catástrofe, estos profesionales han dedicado meses a la planificación previa, la elaboración de estrategias, la reubicación de activos y la clasificación antes de que se produzca la catástrofe para estar a disposición de los clientes cuando más lo necesiten.
Huracán Idalia: restauración forense
Cuando el huracán Idalia tocó tierra como huracán de categoría 3 en la región del Big Bend de Florida el 30 de agosto de 2023, varios condados sufrieron grandes daños en árboles y estructuras que se extendían tierra adentro hasta Georgia, mientras que los condados costeros experimentaron devastadoras mareas de tempestad de 7 a 12 pies de altura.
Mucho antes de la catástrofe de Idalia, EFI Global había sido contratada por el estado de Florida y se había ocupado de ultimar los planes para facilitar la recuperación de tres sistemas escolares distintos que abarcaban varios condados tras la catástrofe. En conjunto, los sistemas escolares abarcaban 196 edificios individuales: escuelas primarias, institutos, edificios auxiliares, etc. Su objetivo era sencillo: restaurar todos los edificios en la medida de lo posible y devolver a los niños a sus aulas lo antes posible tras el paso del huracán.
El gobierno de Florida buscaba una rápida recuperación tras el huracán, lo que aceleró el plazo de intervención a dos semanas. En julio, más de un mes antes de la tormenta, el equipo de EFI Global se había reunido con el cliente y las empresas de recuperación para formular un plan de acción. Se trazaron planes logísticos y de comunicación, y cada parte avanzó con confianza al conocer las expectativas de la otra. Se creó un equipo externo de redacción de informes para facilitar la entrega rápida, en el mismo día o en un día, necesaria para administrar los protocolos, lo que fue esencial para terminar el trabajo.
Una vez que Idalia golpeó, EFI Global desplegó 26 personas a tiempo completo de ingeniería forense e investigación para evaluar el impacto del huracán. El equipo forense llevó a cabo mapeos de humedad, muestreos de materiales de construcción en busca de amianto y muestreos de agua para determinar si había agua de categoría 3 en cada zona afectada. Mientras tanto, se mantuvieron abiertos varios laboratorios para realizar pruebas forenses, y los mensajeros llevaron y trajeron datos y muestras a los laboratorios las 24 horas del día.
El equipo forense también tiene una responsabilidad consecuente al inicio del proyecto: establecer el alcance adecuado. De este modo, se priorizan los esfuerzos óptimos y se cumplen los plazos previstos. Utilizando los planos arquitectónicos de las escuelas, se asignaron a los contratistas de restauración zonas específicas en las que trabajar, en lugar de enfrentarse a toda la bestia a la vez. Determinar el alcance correcto no sólo permite ahorrar tiempo y dar una respuesta eficaz y centrada, sino que también reduce los costes asociados a la reducción de la escala de operaciones para incluir sólo lo necesario.
El equipo externo de redacción de informes elaboró protocolos para las empresas de reparación, en los que se dictaban las acciones que debían llevarse a cabo en el plazo establecido. Gracias a la planificación de resiliencia de alto nivel, las relaciones de larga data con los proveedores prioritarios, los esfuerzos de coordinación estelar y la riqueza acumulada de conocimientos y experiencia de los equipos, los tres sistemas escolares fueron efectivamente autorizados para su apertura en dos semanas; las operaciones del asegurado fueron efectivamente restauradas.
El éxito de esta empresa dependió de la sólida planificación previa que se llevó a cabo, así como de la amplia red de recursos y expertos de la empresa -medio ambiente, investigación de incendios, ajuste de siniestros y náutica, entre otros- disponibles para complementar las necesidades a medida que iban surgiendo.
Huracán Ian: reclamaciones por daños materiales
Un año antes de Idalia, el huracán más costoso de la historia de Florida y el tercero más costoso de la historia de EE.UU. desató el caos. El 28 de septiembre de 2022, el huracán Ian tocó tierra en el suroeste de Florida con una intensidad de categoría 4 y provocó mareas de tempestad catastróficas, vientos dañinos e inundaciones históricas de agua dulce en gran parte del centro y norte de Florida. En total, Ian causaría 150 muertes directas e indirectas y más de 112.000 millones de dólares en daños.
La preparación de los equipos de peritación influye directamente en la rapidez con que el personal puede inspeccionar los lugares del siniestro, peritar los siniestros y atender a los asegurados. Para ello, todas las piezas debían estar colocadas con precisión mucho antes de que Ian tocara tierra para garantizar una recuperación sin contratiempos. El personal de la división CAT de Sedgwick "resuelve para x" de forma inmediata -día tras día- equilibrando todas las variables críticas relacionadas con la preparación CAT: organizando recursos, preparando respuestas a posibles preguntas desconocidas, planificando para cada posible peor escenario.
Comprender de antemano las expectativas del cliente ayuda a formar una estrategia. Las necesidades de los clientes determinan la respuesta adecuada y el personal necesario en cada lugar. Cuando amaina la tormenta, se envían a las zonas afectadas asesores de construcción, peritos preseleccionados, ingenieros y peritos navales. La división de alojamiento temporal de Sedgwick reserva habitaciones de hotel para los peritos cerca de los lugares del siniestro, lo que minimiza eficazmente el tiempo de desplazamiento del personal, maximiza la productividad y acelera el tiempo de respuesta para los asegurados.
Los peritos de Sedgwick gestionaron unos 15.000 siniestros resultantes de la devastación de Ian en toda Florida, a través de entre 170 y 180 clientes. Para gestionar el elevado volumen de siniestros con rapidez y eficacia, era necesario asignar los recursos adecuadamente. Durante la semana previa a la llegada de un huracán, se siguen de cerca los informes meteorológicos y se cambian los recursos en consecuencia. Los huracanes son fenómenos muy cambiantes que requieren la máxima flexibilidad y capacidad de adaptación.
Con una presencia tan amplia, Sedgwick tiene la capacidad de ofrecer apoyo adicional, rotar a la gente dentro y fuera, reducir el tiempo de espera y garantizar una respuesta inmediata. La recuperación de Ian fue un ejemplo de ello. Se envió a la mayoría de los peritos a tiempo completo de Sedgwick con base en Florida, se trajo a más de 60 peritos a tiempo completo de fuera de la región y cientos de 1099 ayudaron en los esfuerzos.
Un perito local voló en su propio avión a lugares de difícil acceso; otro utilizó su barco personal para llegar a las casas de los asegurados. El objetivo último de los peritos de Sedgwick es atender al cliente, por todos los medios necesarios, y prestar sus servicios con empatía en estos momentos traumáticos e inciertos.
Mirando al futuro
Debido al calentamiento global, es más probable que los futuros huracanes que se formen sean más intensos, según la NASA. Los modelos climáticos mundiales predicen que los huracanes provocarán lluvias más intensas y agravarán las inundaciones costeras debido al aumento de las mareas de tempestad y del nivel del mar. La preparación será cada vez más crítica, tanto para los despliegues que respondan a eventos CAT, como para los residentes que se encuentren sin saberlo en la trayectoria de un futuro huracán.
Las personas que viven en zonas propensas a los huracanes pueden adoptar una serie de medidas de preparación para protegerse y proteger sus bienes. Pero no espere a que sea demasiado tarde; el mejor momento para prepararse es antes de que empiece la temporada de huracanes. Considere la posibilidad de elaborar un plan de evacuación, crear un plan de comunicación con una lista de contactos escrita a mano, reforzar su casa, hacerse una revisión del seguro (ya que el seguro contra inundaciones requiere un periodo de espera de 30 días) y documentar sus posesiones, y reunir suministros para catástrofes como alimentos, agua, pilas, cargadores, una radio y dinero en efectivo.
Un agradecimiento especial a Tracey Dodd, directora general de la práctica de grandes pérdidas complejas medioambientales de EFI Global, por su contribución a este artículo.
Leer más:
- Para estar al día de los eventos mundiales de CAT y explorar soluciones de planificación y respuesta, visite el centro de recursos CAT de Sedgwick.
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