Cubrir los gastos de preparación de siniestros

19 de enero de 2023

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En los últimos cinco años, la cobertura de los gastos de preparación de siniestros se ha incluido con más frecuencia en las pólizas.

Antes de que se ampliara la cobertura de esta póliza, el coste del asesor de siniestros designado o del especialista en siniestros interno del corredor corría a cargo del tomador del seguro. La base de los honorarios suele ser un porcentaje preestablecido de la cifra de liquidación final. En raras ocasiones, los honorarios se basan en una tarifa horaria acordada entre el asesor y su cliente/tomador de la póliza.

Como peritos, agradecemos la oportunidad de colaborar con profesionales experimentados que representan al asegurado. En la mayoría de los casos, esto conduce a un proceso de reclamación más eficiente y permite al asegurado centrarse en la recuperación y el funcionamiento de su negocio sin tener que preocuparse por la tramitación de la reclamación. Cuando un perito, una aseguradora y un especialista en siniestros trabajan juntos, se obtienen mejores resultados.

Especificaciones políticas

Cuando se introdujo la cobertura de los costes de preparación de siniestros, normalmente como una extensión de la póliza, fue una novedad para la mayoría de los gestores de siniestros y aseguradoras. La cobertura suele activarse para siniestros de un determinado tipo y nivel. Por ejemplo, un siniestro patrimonial y/o de interrupción de negocio superior a 100.000 libras puede conllevar un límite de responsabilidad, normalmente entre 25.000 y 100.000 libras, aunque a menudo es mucho mayor. Algunas pólizas especifican un límite por siniestro y en conjunto para el periodo de seguro. El texto puede especificar el especialista en siniestros que se puede designar; esto suele ocurrir en las pólizas a medida redactadas por un corredor.

Riesgos financieros

Los recientes y cuantiosos siniestros de interrupción de actividad COVID-19 en pólizas que contaban con importantes límites de preparación de siniestros cogieron por sorpresa a varias aseguradoras. El nivel potencial de exposición financiera que tenían para ciertos tipos de siniestros -en particular cuando no existía un acuerdo previo al siniestro sobre la forma de cobro- era inesperado. Ahora se presta más atención a este tipo de cobertura en el futuro.

Consideraciones sobre la cubierta

Para que los peritos puedan establecer una reserva y estudiar el siniestro presentado, primero tenemos que saber qué base de tarificación, si es que existe, se ha acordado con las aseguradoras. También necesitamos entender qué actividades deben considerarse bajo esta cobertura. En primer lugar, consideremos el alcance de la cobertura prevista en esta cláusula/extensión temática. Algunas pólizas proporcionan una breve definición con términos como preparación, presentación o certificación de una reclamación, sin embargo, varían, y algunas simplemente reconocen los costes de preparación de reclamaciones en el anexo o en la póliza con un límite.

La negociación y el tiempo dedicado a debatir la adecuación y el cumplimiento de las garantías es otro factor a tener en cuenta. Algunas pólizas excluyen específicamente la negociación como gasto cubierto. Aunque no es la intención de la cobertura, en ocasiones resulta difícil identificarla y separarla.

Cuando se acuerda fijar la cobertura en una tarifa horaria, la cuestión clave, como ya se ha dicho, es qué actividades incluir y cuáles no. El perito solicitará y estudiará las hojas de horas. A veces pueden surgir debates y disputas en relación con el cobro de una tarifa horaria cuando la cobertura de la póliza se refiere a costes "razonables", que pueden estar abiertos a interpretación.

En los siniestros en los que no existe un acuerdo previo basado en el cobro (por hora o porcentaje), surgen dificultades cuando este asunto no se plantea hasta el final o las últimas fases del siniestro. A menudo vemos surgir disputas que culminan en que el nivel de pago al tomador del seguro es inferior al acuerdo financiero que hizo cuando designó a su especialista en siniestros, y a lo que está obligado a pagar. Cualquier déficit financiero para el cliente en el pago no es evidentemente la situación prevista desde que se proporcionó este tipo de cobertura.

El nivel y la base de los honorarios acordados entre los especialistas en siniestros y sus clientes no suelen cambiar cuando existe cobertura en virtud de la póliza. Por consiguiente, cuando existe cobertura, el argumento esgrimido es que ésta debería transferirse simplemente a los aseguradores a la tarifa normal de mercado del especialista en siniestros, siendo la única restricción potencial el límite establecido en la póliza.

De cara al futuro

Sencillamente, todas las partes deben acordar antes de un siniestro qué actividades están cubiertas por esta cláusula y en qué se basará el cobro. No es recomendable dejar este paso para el final de un siniestro y arriesgarse a disputas que culminen en que el cliente no recupere la totalidad de sus desembolsos.