Por Luke Evans, director de desarrollo empresarial
La lucha por abastecerse de semiconductores está perturbando las cadenas de suministro de la automoción, retrasando la producción y desinflando las ventas de automóviles.
Dado que se prevé que la actual escasez de chips dure hasta 2023, los fabricantes de automóviles se enfrentan a un largo y difícil camino por delante.
Construir coches modernos sin chips es imposible. Un coche medio tiene 1.400 semiconductores, que controlan todo, desde los airbags y el infoentretenimiento hasta la dirección, el ahorro de combustible y la asistencia avanzada al conductor. De hecho, el 37% de la demanda de semiconductores en Europa procede de los fabricantes de automóviles.
Durante 2021, los fabricantes de automóviles lucharon por obtener suficientes chips para apoyar la producción de vehículos.
El aumento de la demanda y las ralentizaciones operativas relacionadas con pandemias obstaculizaron seriamente el suministro de semiconductores, creando una escasez mundial que se estima que ha costado a la industria automovilística mundial 210.000 millones de dólares en ingresos durante 2021. En consecuencia, la producción europea de automóviles cayó un 23%, cinco millones de unidades menos que en 2019, según la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA).
De cara al futuro, los avances en los sistemas de gestión de baterías y la mayor demanda de vehículos conectados y sistemas avanzados de asistencia al conductor (ADAS) ejercerán aún más presión sobre las cadenas de suministro de chips, que podrían tardar un año más en recuperarse de las carencias actuales.
Los fabricantes de equipos originales no son los únicos que buscan componentes desesperadamente.
Todos los sectores buscan chips seguros. Incluso las grandes marcas tecnológicas se enfrentan a la escasez de chips. Apple, por ejemplo, espera que esta temporada navideña suponga más de 6.000 millones de dólares en ventas perdidas. La UE fabrica sólo el 10% de los semiconductores del mundo y depende de proveedores estadounidenses o asiáticos para satisfacer sus necesidades. En 2020, los automóviles fueron el tercer producto de exportación de Europa, pero la industria automovilística europea sigue abasteciéndose en un 60-70% de chips procedentes de China y Taiwán.
¿Puede la UE tomar la iniciativa para impulsar la oferta?
Con tanto en juego, tanto la UE como las empresas del sector privado están tomando medidas positivas para paliar la escasez de chips y aplicar salvaguardias a largo plazo aumentando la capacidad de producción europea. En septiembre de 2021, los legisladores de la UE propusieron la Ley Europea de Chips (ECA) para ayudar a unificar e impulsar la producción industrial y la capacidad de fabricación en la industria de semiconductores. Mientras tanto, fabricantes de chips como Intel y Bosch tienen previsto aumentar sus inversiones y ampliar sus operaciones en Europa. El plan es duplicar la producción europea de chips de aquí a 2030.
Los nuevos avances tardarán en dar sus frutos.
Con tanto énfasis en la dependencia de la tecnología, la escasez de chips y las interrupciones de la cadena de suministro, la probabilidad de que se produzca un evento de seguridad es alta. Nuestro último informe sobre el índice de retiradas muestra que las alertas de automóviles del tercer trimestre de 2021, aunque inferiores a las del segundo trimestre, siguen estando un 14 % por encima de la media trimestral de los últimos 15 años.
Si se dedica a la producción de automóviles, debe prever algunas consecuencias y estar preparado para los problemas derivados de la calidad, los fallos y el suministro comprometido. Esto incluye complementar su programa de gestión de crisis con un plan integral de retirada de productos. Del mismo modo, los planes existentes deben reevaluarse y ponerse a prueba para garantizar que están preparados para hacer frente a las nuevas carencias y riesgos de los semiconductores a medida que vayan surgiendo.
Para Leer más sobre el auge y la caída de las tendencias de retirada de productos y para adquirir conocimientos sobre cómo planificar una, descargue la última edición de nuestro informe sobre el índice europeo de retiradas de 2021.