A bordo de una ciudad flotante

27 de enero de 2022

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Por Aidan Fitzgerald, perito naval y de ingeniería de MCL

Aunque parezca que la tecnología moderna ha "encogido" el mundo, el océano sigue siendo un espacio vasto y aislado.

Los buques pueden estar a miles de kilómetros de tierra en cualquier dirección, a veces luchando contra condiciones inhóspitas, por lo que las instalaciones de a bordo deben ser capaces de gestionar cualquier problema que pueda surgir. Todos los grandes buques de la marina mercante, ya sean petroleros, gaseros o cargueros, son como ciudades flotantes equipadas con todo lo necesario para crear un entorno vital autosuficiente durante semanas.

Un vistazo a la vida a bordo

Los grandes buques disponen de su propia central eléctrica, que genera hasta 6.600 V y cuenta con sistemas de aire acondicionado muy similares a los de hoteles, centros comerciales y otros edificios comerciales. La cocina, totalmente equipada, incluye congeladores y refrigeradores. Otros equipamientos de hostelería incluyen una planta desalinizadora para la producción de agua dulce, una depuradora de aguas residuales, instalaciones de recogida de basuras y un laboratorio a bordo. En él se comprueban los niveles de bacterias y cloro del agua potable, la dosificación química del agua de refrigeración de calderas y motores, la viscosidad, el contenido de agua y sal del combustible y el aceite, y la calidad del aire de las botellas de los equipos de respiración.

También hay un centro médico totalmente equipado, botes de rescate y diversos equipos eléctricos y electrónicos, como sistemas de navegación, radios, ordenadores y servidores, receptores de satélite y radares. Cada buque cuenta con numerosas instalaciones e instrumentos técnicos que pueden encontrarse en la mayoría de las situaciones industriales terrestres, aunque no siempre se utilicen con la misma finalidad. Por ejemplo, una centrifugadora utilizada para la purificación del petróleo a bordo es casi exactamente el mismo equipo que se utiliza en los procesos de producción láctea para separar la nata de la leche.

Experiencia práctica

Como ingeniero naval, ser capaz de arreglar o reconstruir todos los equipos imaginables y encontrar soluciones operativas prácticas es lo que hace que este campo sea tan fascinante. A bordo, dispondrá de talleres de ingeniería totalmente equipados con tornos, fresadoras, taladradoras, máquinas de soldadura por arco eléctrico, soldadura por gas y corte por plasma, gatos hidráulicos y prensas. También dispone de grandes calderas, sistemas de recuperación de calor e intercambiadores de calor, y turbinas de vapor para accionar bombas y generar electricidad. Hay sistemas de tratamiento de combustible y aceite y diversos equipos hidráulicos y neumáticos -bombas, compresores, secadores, separadores y filtros-, plantas de generación y manipulación de gas, sistemas de bombeo, grúas y equipos de elevación.

Mantener, reparar y reconstruir un espectro tan amplio de maquinaria resulta especialmente beneficioso a la hora de discutir con los clientes las reparaciones, las opciones de reinstalación y los costes asociados. Ello permite a nuestro equipo asesorar sobre el mejor tipo de solución de reparación. A menudo, podemos ofrecer opciones alternativas y potencialmente más adecuadas y rentables que las propuestas por el asegurado o sus proveedores.

Presiones comerciales

A medida que las instalaciones y la maquinaria se vuelven más avanzadas tecnológicamente, es esencial contar con sólidos conocimientos de localización y detección de averías. Debido a las presiones comerciales, las decisiones relativas a los métodos económicos de restablecimiento y mitigación de pérdidas deben tomarse rápidamente para minimizar el tiempo de inactividad. Cuando se trabaja a bordo, a menudo se está sometido a una enorme presión para conseguir que determinados motores, maquinaria o sistemas vuelvan a funcionar en plazos ajustados. Al fin y al cabo, el buque puede tener que abandonar un puerto a una hora determinada y los retrasos son increíblemente costosos.

Cuando hay un problema con una máquina, ya sea en el agua o en tierra, los conocimientos y la experiencia de nuestro equipo naval y de ingeniería para diagnosticar el problema ahorran tiempo y gastos. Al proporcionar un resumen inicial de la situación, podemos determinar si se necesitan otros especialistas y asesorar a todas las partes sobre la mejor manera de mitigar las pérdidas. Visite nuestro sitio web Leer más para conocer nuestras soluciones de peritaje de siniestros graves y complejos.