Por Graham Plaister, director de agricultura, Reino Unido, y John Colquhoun, director de EFI Global, Reino Unido
Este verano, el Reino Unido ya ha sido testigo de los efectos devastadores que pueden tener las temperaturas excesivamente altas.
La ola de calor de julio demostró hasta qué punto solemos estar mal equipados para hacer frente a este tipo de condiciones meteorológicas extremas, y muchos agricultores tuvieron dificultades para adaptar edificios diseñados para retener el calor en lugar de repelerlo. Las medidas de aclimatación resultaron insignificantes, ya que la subida de las temperaturas fue demasiado fuerte para muchas instalaciones.
Reducción de márgenes
Los elevados costes de los piensos y las facturas energéticas ya suponen un reto para el sector ganadero británico, y el impacto añadido del estrés térmico es de gran alcance. Las unidades de ganadería intensiva pueden tener más de 50 años y los cobertizos se mantienen mediante un simple reacondicionamiento una vez cada década. No se construyeron para soportar niveles de calor sin precedentes. El tiempo y los costes invertidos en modificar los edificios dificultan la producción, especialmente en el caso de las estructuras que deben reconstruirse por completo. Por no hablar del gasto adicional asociado a la gestión y mejora de la salud de los animales una vez que el calor remite. El aumento del consumo de agua también va de la mano del aumento de las temperaturas: cuanto más calor hace, mayor es el consumo de agua que requieren los cultivos, los animales de granja y los seres humanos. El suministro de agua nunca ha sido un problema en el Reino Unido, pero podría llegar a serlo en el futuro.
Reacciones y respuestas
Debido a las condiciones de sequía, las pérdidas de cosechas son constantes y, por si el calor no fuera suficiente desafío, en ciertas zonas existe la posibilidad de que se produzcan sequías. En muchas zonas de Inglaterra y Gales, por ejemplo, hace meses que no llueve.
El ser humano ha desempeñado un papel en el aumento de los incendios forestales debido a la cantidad de gente que acampa en zonas rurales y disfruta del campo. En Escocia, por ejemplo, todo el mundo tiene derechos legales de acceso a la mayor parte de las tierras y aguas interiores, siempre que respete la intimidad, la seguridad, el ganado y los medios de subsistencia. Aunque a menudo son accidentales, es imperativo educar a las comunidades en prácticas seguras de acampada, porque los incendios forestales pueden producirse y de hecho se producen.
Es seguro decir que la preparación para el calor del verano ha sido muy diferente a la de años pasados. Hace cientos de años, pocos podíamos prever el alcance que tendría el cambio climático en nuestras vidas. Ahora, con las consideraciones medioambientales y los cambios legislativos en juego, adaptarse a estas condiciones no es negociable. Resulta alarmante que algunos expertos afirmen que lo que el Reino Unido experimentó este año en un periodo de dos días acabará ocurriendo con regularidad en un periodo de dos a tres semanas.
Preparación temprana y frecuente
Si tenemos en cuenta las temperaturas extremas para el resto del verano y los años venideros, es imperativo establecer planes a corto, medio y largo plazo y poner en marcha los preparativos. Esto incluye revisar las políticas, trasladar el ganado, instalar ventiladores y planificar la reconstrucción necesaria. Pero esto no es todo. Recientemente, nuestro equipo trabajó en un siniestro relacionado con un hotel rural construido en una ladera conocida por su alto riesgo de incendios forestales debido al terreno. Para mitigar los daños en caso de incendio, recomendaron sustituir la zona de pinos circundante por arbustos frutales. Este "cortafuegos" de vegetación menos inflamable permitió a la zona resistir incendios posteriores, causando daños mínimos.
Para asegurarse de estar en la mejor posición para responder a las altas temperaturas, los agricultores necesitan disponer de planes estratégicos y creativos con socios experimentados en reclamaciones agrícolas y medioambientales. Es posible que a los agricultores británicos les lleve algún tiempo adaptarse y superar las dificultades provocadas por el calor estival. Pero nos comprometemos a ayudar a nuestros clientes y comunidades en cada paso del camino.
Para más información, visite www.efiglobal.com y www.sedgwick.com.