Por Graham Hawkins, director de ajustes medioambientales en el Reino Unido, y Laura Horrocks, directora de tecnología e inteligencia contra el fraude
El aceite se ha convertido en un bien preciado y ahora es objetivo de los ladrones en todo el Reino Unido.
La exposición es amplia: desde locales comerciales hasta propiedades rurales y vehículos privados. A una empresa de transportes le robaron recientemente 24.000 libras de gasóleo y, en el proceso, dañaron los tanques de almacenamiento. Los autores dejaron el gasóleo goteando en las instalaciones, lo que provocó pérdidas adicionales.
Junto con la escalada de los costes del combustible, la presión sobre el Gobierno para cumplir los objetivos de emisiones ha dado lugar a un cambio en la legislación relativa al gasóleo "rojo". A partir del 1 de abril de 2022, cualquier propiedad doméstica o comercial tendrá que cumplir con los cambios establecidos en la reforma del derecho al gasóleo rojo y otros combustibles bonificados, lo que reducirá o eliminará la disponibilidad de gasóleo rojo más barato para muchos.
En medio de la actual crisis del coste de la vida, el sector asegurador debe estar preparado para un posible aumento de las reclamaciones por robo de combustible, fraude y contaminación ambiental.
¿Qué es el gasóleo rojo?
También conocido como gasóleo, gasóleo todoterreno o "gasóleo para tractores", el gasóleo rojo se utiliza normalmente para el transporte agrícola, la generación de energía y determinados usos comerciales de calefacción o combustión. No se utiliza en vehículos de carretera normales, lo que significa que se grava a un tipo más bajo y es mucho más barato. Existen requisitos legales estrictos sobre cuándo y cómo puede utilizarse, por eso se tiñe de rojo para ayudar a identificar el consumo ilegal.
Las empresas que ya no cumplan las nuevas normas tendrán que vaciar y limpiar sus equipos para que sean compatibles con el gasóleo "blanco" normal. Los expertos recuerdan a los clientes que este proceso conlleva un coste, pero muchos no son conscientes de ello o han tardado en reaccionar a estos cambios mientras aún se disponía de gasóleo rojo barato. En última instancia, algunos propietarios pueden decidir realizar ellos mismos este trabajo, lo cual no es recomendable. Al manipular este tipo de combustible, siempre existe la posibilidad de que se produzcan incidentes medioambientales.
Contaminación medioambiental
En su prisa por abandonar la escena del crimen, los ladrones de petróleo suelen dejar las bombas en marcha o fallan sus conexiones improvisadas de mangueras, lo que podría provocar un aumento de los incidentes de contaminación a medida que se incrementa este tipo de delito. Los costes de limpieza subsiguientes son potencialmente enormes, ya que el trabajo debe cumplir las exigencias normativas y debe ser llevado a cabo por un equipo de gestión de siniestros medioambientales experimentado y técnico.
Los tomadores de seguros y sus asesores también deben asegurarse de que se ha contratado una cobertura adecuada para responder a las responsabilidades reglamentarias, por oposición a la responsabilidad civil o la negligencia. El hecho de que la póliza indique que la "contaminación" está cubierta no significa que siempre vaya a responder.
Mayor riesgo de fraude
Para cumplir la nueva normativa sobre gasóleo rojo, los propietarios y operadores podrían encontrarse con la necesidad de mejorar sus tanques de almacenamiento de petróleo, lo que podría influir en la actividad fraudulenta en torno a los "daños" existentes. En los próximos meses, cualquier pérdida en los tanques debe investigarse más a fondo para considerar la edad y el estado del equipo y cuestionar la legitimidad de la reclamación cuando proceda.
En algunas zonas del sur de Gales han aumentado los robos de gasóleo doméstico en las últimas semanas. Estas reclamaciones también pueden ser exageradas si, por ejemplo, se denuncia el robo de un depósito lleno o casi lleno. Los justificantes de compra y uso deberán ser examinados más a fondo. Y como muchos particulares y empresas empiezan a pasar apuros económicos, los reclamantes podrían verse tentados a presentar reclamaciones falsas como consecuencia de la creciente exposición mediática de los robos de aceite.
¿Y ahora qué?
Los clientes deben estar atentos en los próximos meses. Es posible que se necesite más seguridad y un circuito cerrado de televisión (CCTV) para proteger grandes cantidades de aceite en establecimientos comerciales. Lo mejor es aparcar los coches en zonas bien iluminadas y colocar el tapón del depósito cerca de una pared o barrera de algún tipo. Aunque los robos de combustible en vehículos pueden ser poco cuantiosos, los daños causados al acceder a ellos pueden ser importantes. Los depósitos domésticos de gasóleo de calefacción deben estar bien mantenidos y, si se encuentran fuera de la vista de la residencia principal, deben inspeccionarse periódicamente para detectar cualquier indicio de manipulación.
Si necesita asistencia experta en materia de vertidos medioambientales, contaminación, sospecha de fraude o cualquier tipo de reclamación por robo de petróleo, estamos aquí para ayudarle.
Graham Hawkins| director, UK environmental adjusting
M +44 7920 871 042
Laura Horrocks | directora, responsable de tecnología e inteligencia del fraude
M +44 7788 350 317
Etiquetas: reclamación, vertidos medioambientales, Fraude, Inspección, Legislación, petróleo, contaminación, Propiedad, gasóleo rojo, Riesgo, riesgos, robo, Reino Unido, United Kingdom, View on property