por Ian Newth - jefe de construcción e ingeniería y Andrew Cavan - jefe de grandes siniestros y siniestros complejos - Norte, Sedgwick UK
Estamos preparados para responder a situaciones impensables. Y aunque las alertas de mal tiempo indican la posibilidad de una marejada, se está gestando una nueva tormenta que podría golpear en cualquier lugar, en cualquier momento y sin previo aviso. El riesgo global potencialmente significativo al que nos enfrentamos actualmente son los disturbios civiles.
Crisis del coste de la vida
Históricamente, en épocas de dificultades sociales y económicas, las protestas, marchas y huelgas han derivado a menudo en enfrentamientos con las autoridades policiales. Entre las revueltas anteriores provocadas por una crisis del coste de la vida se incluyen los disturbios de Inglaterra en 1981, la Primavera Árabe de 2010 y las protestas de los Chalecos Amarillos franceses en 2018.
Asimismo, en agosto de 2011, lo que comenzó como una marcha de protesta pacífica en Londres se convirtió rápidamente en un gran disturbio. Se dice que las redes sociales desempeñaron un papel importante a la hora de alimentar actos de imitación en otras grandes ciudades en los días siguientes. Miles de manifestantes fueron detenidos, cinco personas murieron, muchas resultaron heridas y los daños materiales se estimaron en 200 millones de libras.
Riesgos socioeconómicos
Hoy en día, en el Reino Unido se informa ampliamente de que los salarios no pueden seguir el ritmo de la creciente inflación, y los consumidores están preocupados por cómo afrontarán los meses de invierno. La subida de los precios de la energía también repercute en los costes de fabricación, producción y distribución de suministros y servicios vitales. Aunque los problemas de la cadena de suministro provocados por el COVID parecen estar remitiendo, la inflación se ve ahora afectada por la escasez de mano de obra, diversas huelgas y otros factores geopolíticos.
El Índice de Precios de Consumo (IPC) aumentó hasta el 10,1% en julio, la cifra más alta desde febrero de 1982, mientras que la confianza de los consumidores se sitúa en mínimos históricos.
No estamos solos. El último Índice de Disturbios Civiles de Verisk Maplecroft muestra que el pasado trimestre más países experimentaron un aumento del riesgo de disturbios civiles que en cualquier otro momento de los últimos siete años, en gran parte debido a las presiones socioeconómicas, que siguen aumentando. De 198 países, 101 experimentaron un aumento del riesgo, frente a sólo 42 en los que disminuyó".
Un mundo interconectado
Nuestro mundo está cada vez más interconectado, y las comunicaciones en torno al descontento social y político son fáciles de publicar y compartir en las redes sociales, lo que facilita la creación de una red de simpatizantes en todo el mundo. La amplia difusión de actualizaciones y vídeos también puede amplificar los acontecimientos que tienen lugar en otras partes del mundo y crear un efecto dominó en zonas más cercanas.
Aunque nadie puede predecir dónde o cuándo pueden producirse disturbios civiles, en el actual clima mundial parece sensato asegurarse de que estamos preparados para lo peor. Y entender qué está cubierto y qué no, para asegurados, aseguradoras y corredores, es un buen punto de partida.
Consideraciones generales
En cualquier disturbio a gran escala, las infraestructuras y los activos estatales del país pueden estar en peligro, y las revueltas pueden afectar significativamente a los ingresos del turismo y la hostelería locales. Los enfrentamientos que se tornan violentos también pueden provocar grandes daños materiales, en vehículos y pérdidas por interrupción de la actividad empresarial.
Para las grandes organizaciones multinacionales, la exposición a estos riesgos es mayor. Sería aconsejable que revisaran el alcance de la cobertura proporcionada por sus aseguradoras en relación con huelgas, conmoción civil y disturbios. También se podrían investigar las áreas especializadas de cobertura para la violencia política.
Compensación
En Inglaterra y Gales, en virtud de la Ley de Indemnización por Disturbios de 2016 (y de una legislación similar en Escocia e Irlanda del Norte), las aseguradoras y los asegurados pueden presentar reclamaciones contra la autoridad policial local cuando se hayan producido daños en edificios, contenidos, existencias y vehículos a motor como consecuencia de un disturbio. Un disturbio tiene una definición legal específica y hay plazos estrictos en el proceso de reclamación, por lo que es fundamental que se reúnan pruebas de inmediato para demostrar que se ha producido un disturbio legalmente definido.
No obstante, cabe señalar que este régimen no permite reclamar indemnizaciones por las pérdidas derivadas de la interrupción de la actividad empresarial, ni tampoco los gastos de alojamiento alternativo y pérdida de alquileres, en caso de que estén cubiertos por una póliza de seguros.
Acciones rápidas
A medida que una crisis sustituye a otra, los próximos meses podrían ser muy difíciles para muchos miembros de nuestra comunidad mundial. Pero ante la posibilidad cada vez mayor de que se produzcan disturbios civiles, debemos estar preparados y listos para responder rápidamente a todos los aspectos de la situación si ésta evoluciona. Las acciones tempranas mitigarán el alcance de los daños y contribuirán a una recuperación más rápida y fluida para todos.