Preparativos para el próximo huracán del Caribe

7 de julio de 2022

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Por Laura De Sordi, Directora General para América Latina y el Caribe, y Roland Riviere, Ajustador General Ejecutivo Senior.

Cuando la mayoría de la gente piensa en prepararse para un huracán, se imagina tapiando ventanas y reponiendo el agua embotellada y los alimentos no perecederos de su kit de emergencia doméstico.

Para quienes trabajamos en el mercado de seguros del Caribe, la preparación ante las catástrofes adquiere un significado mucho más amplio. Desempeñamos un papel fundamental para que las familias y las empresas puedan reconstruir sus hogares tras una catástrofe, y nuestra preparación para la tormenta afecta directamente a la rapidez con la que podemos inspeccionar los lugares siniestrados y tramitar los siniestros.

Previsiones estacionales

A diferencia de los terremotos, que a menudo se producen sin previo aviso, la temporada de huracanes en el Atlántico es un acontecimiento anual recurrente, y la actividad de las tormentas puede seguirse y predecirse hasta cierto punto. Mucho antes de que los medios de comunicación empiecen a informar sobre la próxima gran tormenta que se avecina en el mar, los profesionales de los seguros estudian detenidamente los modelos de predicción de los expertos meteorológicos para la próxima temporada de huracanes.

En mayo, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) pronosticó que la de 2022 será probablemente la séptima temporada consecutiva de huracanes atlánticos por encima de la media, con 14-21 tormentas con nombre -incluidos entre tres y seis huracanes de categoría 3, 4 ó 5-. El aumento previsto de la actividad de las tormentas se atribuye a varios factores climáticos, como temperaturas del mar más cálidas y vientos alisios tropicales más débiles.

Estas previsiones ayudan a los profesionales de los seguros a prepararse para lo que pueda ocurrir durante la temporada de huracanes. Las predicciones de fuertes tormentas nos hacen saber que necesitamos planes sólidos de recuperación de desastres e infraestructuras tecnológicas de reserva para nuestros clientes, junto con peritos bien formados y otros especialistas en respuesta a catástrofes repartidos por toda la región y listos para desplegarse en cuanto se les avise.

Las relaciones importan

Como nuestros colegas escribieron recientemente en este blog, "La mejor manera de gestionar la imprevisibilidad es desarrollar e invertir hoy en asociaciones a largo plazo." La preparación para la temporada de huracanes es un excelente ejemplo de esta filosofía.

Las aseguradoras que esperen al día siguiente de una tormenta para buscar servicios de peritaje de siniestros y otro tipo de ayuda para la recuperación en caso de catástrofe tendrán dificultades para encontrar recursos de alta calidad y disponibles, ya que casi todos los proveedores de servicios estarán ya comprometidos con sus socios establecidos. Por el contrario, quienes hayan invertido en establecer relaciones de confianza con los socios adecuados se asegurarán de que sus asegurados reciban una atención prioritaria cuando se produzca la catástrofe.

Intercambio abierto de información

Nuestros 25 años de experiencia en el sector de los seguros y reaseguros en el Caribe han demostrado que cuantos más datos compartan los clientes con nosotros antes de una catástrofe, más eficaz será nuestra respuesta. Por ejemplo, saber cuántas pólizas tienen en distintos territorios nos ayuda a prepararnos para atender las necesidades específicas de esos clientes con los recursos adecuados. ¿Necesitaremos especialistas en la tramitación de siniestros de hogar o comerciales? ¿Los asegurados están concentrados en grandes ciudades o distribuidos por poblaciones más pequeñas? ¿Necesitamos estar preparados para siniestros en instalaciones especiales, como centrales eléctricas, que requieren una pericia de peritación particular? El perfil del equipo que enviamos para responder a una catástrofe depende en gran medida de estos detalles, y las respuestas a estas preguntas informan de nuestra capacidad para hacer coincidir las necesidades sobre el terreno con los colegas adecuados para el trabajo.

Nos hemos encontrado con algunos clientes reticentes a revelar información tan sensible antes de una situación de crisis. Aunque entendemos su reticencia, no podemos dejar de subrayar la diferencia que supone disponer de este tipo de datos de los clientes (mantenidos en la más estricta confidencialidad, por supuesto) antes de una catástrofe. Los huracanes del Caribe suelen provocar cortes de electricidad generalizados, que dejan fuera de servicio las redes de comunicación y los sistemas tecnológicos. Sabemos por experiencia que no podemos confiar en las prácticas, los flujos de trabajo y el intercambio de datos "habituales" una vez que se desata una tormenta. Los clientes que nos confían la información pertinente con antelación cosecharán los beneficios de una planificación estratégica ante catástrofes y de una respuesta más coordinada y rápida de nuestro equipo ante la catástrofe.

Cuando se trata de sentar las bases de nuestras valiosas asociaciones y de garantizar que podamos satisfacer las necesidades de los clientes en el Caribe tras una catástrofe natural, realmente no hay nada mejor que el intercambio temprano y abierto de información. Díganos cómo podemos ayudarle a prepararse para la temporada de huracanes de 2022 en el Caribe.

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